ÉL GUÍA NUESTRO CLUB DE LECTURA
Comencé a caer por la Biblioteca de Villaviciosa (Asturias) hace un par de años, cuando empezamos a impartir el Taller de Relato Corto del Ateneo Obrero. Desde entonces he descubierto grandes novelas de pequeñas editoriales (Paracaidistas, El diablo a todas horas, Chump Change…), joyas que no me he cansado de recomendar y regalar, libros frescos, sin ataduras comerciales, que me mostraron diferentes maneras de narrar una historia. Lo mejor que he leído estos últimos dos años ha sido gracias a los consejos de Manuel González Martínez, bibliotecario del citado templo desde hace veintiocho años y gran conocedor de la literatura contemporánea. Así que nada de egoísmos, él será quien dirija el Club de Lectura de Creatividad Literaria, será nuestro Oh Querido Gurú. En este Club no hay normas, solo recomendaciones y una invitación a que comentéis y debatáis las lecturas. En la siguiente entrevista podréis conocer mejor a quien será el responsable de la propuesta de cada mes, aunque si tenéis la posibilidad, no lo dudéis, acercaos a la Villa:
¿Qué entiendes tú por una buena novela?
Desde el punto de vista del bibliotecario cualquiera con la que el lector disfrute, aunque a mí no me guste. Desde el punto de vista personal, aquella que utilice bien el lenguaje, que haya un buen vocabulario. Por eso me gustan los autores sudamericanos, porque en general creo que dominan mejor que nosotros el castellano. En nuestro idioma destaco a Javier Marías, a Enrique Vila-Matas y a Vargas Llosa. Da gusto leer cómo escriben.
¿Con qué libros te enganchaste a leer y cuál ha sido el último que te ha sorprendido?
De pequeño leía los cómics de Brugera: Pulgarcito, Pumbi… Los tengo todavía. Por supuesto leí Los Cinco y muchas historias del Oeste. Me encanta la serie del Coyote, nunca la olvidaré. También me gustaban las historias de aventuras: Verne, Salgari, Jack London… Casi siempre eran libros de la biblioteca, me encantaba venir a la biblioteca. De adolescente, entre los catorce y los dieciocho, tuve la típica etapa de no leer, pero en la universidad descubrí a los autores californianos de la generación Beat. Mis costumbres literarias siempre han ido al unísono de mis gustos musicales. En la mili tenía mucho tiempo para leer y así conocí a Homero, Baroja, Dumas, los rusos… Respecto al último libro que me ha sorprendido ha sido La última palabra, de Hanif Kureishi. Últimamente me gustan las novelas que hablan de escritores, de editores, etc. Tengo varios pendientes a los que les tengo muchas ganas: el último de Richard Brautigan, el de Santiago Lorenzo, el de Harry Crews…
Como bibliotecario de un concejo pequeño, ¿aconsejas lecturas según cada usuario?
La mayor satisfacción para un bibliotecario es recomendar un libro y que te digan que les ha gustado. Procuro seleccionar lo que creo que les puede gustar, independientemente de lo que me parezca a mí. Que por mi culpa alguien dejara de leer sería la mayor de las derrotas. Muchas veces, aunque no haya leído el libro, intuyo lo que les puede gustar. No es difícil.
Los bibliotecarios tenéis cierta libertad en la adquisición de libros ¿Cuáles son las joyas de esta biblioteca?
He de decir que en cuanto a la sección infantil me fío al cien por cien de los técnicos de la consejería de cultura del Principado. Son muy buenos y sé que la gente está muy contenta. Respecto a cómics y novelas para adultos selecciono yo la mayoría. Hay algunas joyas históricas que están en el depósito, como Historia de España de 1882, de Lafuente, las primeras ediciones de Tarzán, los Episodios Nacionales de Galdós… En cuanto a otro tipo de joyas, la biblioteca tiene una muy buena colección de literatura japonesa: Dazai, Riu Murakami… También hay muchas novelas reeditadas de los años cincuenta y sesenta, como Dog Soldier. La cuestión es estar al tanto de lo que sacan las editoriales pequeñas.
El escritor Chus Fernández dice que eres un gran conocedor de literatura contemporánea. ¿Cómo te 
mantienes al día?
Como te dije antes, siguiendo a las editoriales pequeñas, porque cuidan mucho la traducción y porque publican literatura de los cuarenta, los cincuenta y adelante que a las grandes editoriales no les interesa. Me gusta cómo trabajan Sajalín, Blackie Books, Mal Paso, Libros del Silencio, Acuarela, Impedimenta, Alpha Decay y Hoja de Lata. Más pistas, seguir algunos blogs, sobre todo el de Kiko Amat, y leer la selección de libros que publican Vanity Fair y por supuesto Rockdelux. Cuando a final de año publicaron su lista de las once mejores novelas de 2014, en esta biblioteca teníamos diez de esos títulos. Todo un orgullo.
También eres aficionado a los cómics y eso se nota en el centro. ¿Cuáles recomiendas?
Recomiendo las colecciones de Predicador y Odio. Por supuesto From Hell y V de Vendetta, y a los autores Alan Moore, Taniguchi, Dios quiera que le den el Nobel, Tezuka, uno de los más grandes, y siempre, siempre recomiendo y regalo a Takashi Murakami, el autor de la maravillosa El perro enamorado de las estrellas.
Me han dicho que viene gente de fuera a esta biblioteca.
Sí, que yo sepa viene gente de Gijón y de Oviedo tanto por los cómics como por la estupenda colección que tenemos de literatura contemporánea.
¿Y cómo es tu biblioteca casera? ¿Qué libros tienes en casa?
De americanos tenfo a Auster, McCarthy, Carver y a los de la generación Beat. Ingleses, por ejemplo a Irvin Weslch y Hornby. Japoneses, a Mishima, Murakami o Yoko Ogawa. De Mishima lo tengo todo menos El pabellón de oro, uno de los mejores libros que se hayan escrito. Una pena que no se reedite con una traducción mejor. De autores españoles tengo a Chus Fernández, a Ray Loriga, Félix Romeo y a David Trueba. Y cada cinco años más o menos releo Sidharta, de Herman Hesse. Leo muchos libros de música, como el de Jonathan Lethem Todavía no me quieres, y también estoy comprando libros de músicos que escriben novelas, aparte de Nick Cave, tengo los de los españoles Santi Campo y Xoel López, que además son amigos. Otros que me gustan y que tengo en casa son los de Steve Earle o Mica Hinson. En la biblioteca también hay una buena colección de libros de música y de músicos. No sé, por ejemplo el del miembro de Belle&Sebastian, Stuart Davis.
¿Cuáles son tus librerías favoritas?
Va parejo a mis ciudades favoritas, que son Tokio, para conocer, y San Francisco para vivir. En Tokio está Mandarake, la mejor librería de manga del mundo, y en el Bario Italiano de San Francisco está la genial librería City Light, justo entre el Museo de la Generación Beat y el mejor pub del mundo, donde dicen que Coppola escribió El Padrino.
¿Con qué novela y por qué empezaremos el Club de Lectura de Creatividad Literaria?
Con El nadador del Lower East Side, de Arthur Nersesian, editado por El Aleph. Es una historia que combina el amor y el arte en un Nueva York bastante salvaje. Es de estas novelas que la mitad de la gente que la sacó de la biblioteca se la ha comprado.
